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Mas de Torrent

viernes, mayo 4th, 2012 | Hoteles, Restaurantes, Resto de Catalunya

El Hotel Mas de Torrent, bajo el sello Relais & Châteaux, es uno de los complejos hoteleros más reputados de Catalunya. Llegamos allí con uno de estos bonos regalo que tan de moda se han puesto y que tanto agradecemos los fans de las escapadas de fin de semana.

El paquete, además del alojamiento y las bendiciones del spa, incluía una cena con un menú semicerrado, menos exuberante que el degustación que ofrecen en la carta, aunque con algunas alternativas para cambiar aquello que, a priori, no nos sedujera.

Caluroso recibimiento y sala elegante, que ya formaba parte de la masía original del siglo XVIII, parcialmente acristalada con vistas al jardín y mesas espaciosas.

Para abrir el apetito, un pequeño snack de pan de queso relleno de queso cremoso y acompañado de un chutney de cebolla.

Empecé el menú con un arroz cremoso de ceps y espárragos trigueros silvestres con foie poêlée. Magnífico, tanto en cocción como en profundidad de sabores, aunque a mi partenaire Xocolata le pareció un inicio demasiado demoledor y escogió empezar por una fresca y sedosa vieira con langostinos sobre un lecho de puré de zanahorias.

Continuamos con un extraordinario morro de bacalao, muy meloso, de cocción impecable, casi translúcido, con un punto subido de sal -personalmente, me gusta así-, acompañado de un falso blini de patata y una quenelle compuesta por una picada de piñones y encurtidos, en la que prevalecía la alcaparra. El único pero, una ración cuantiosa, excesiva para faltar todavía un plato de carne.

Y llega la carne, concretamente pato, en magret. Dados gruesos de piel crujiente y sabor intenso, bien complementado por la acidez de los frutos rojos diversos y, contrastando texturas, unas chips -por cierto, ¿soy el único que piensa que donde esté la patata se quite la yuca?-. Buen plato, al que sólo le faltó algo más de ternura. La ración, también muy generosa.

El menos convincente, y con diferencia, fue el postre. Decepcionó un flojo combinado de helados de vainilla y frambuesas, escondiendo un fino merengue seco, y todo ello cubierto de nata y un coulis de frambuesa. Nada que ver con la excelente demostración repostera exhibida en la sala de lectura del hotel para el tea-time.

Como vino incluido en el menú nos ofrecieron un sencillo pero eficaz 3 Fincas (2008) de Castell de Perelada que, aun cumpliendo su papel, me pareció una elección algo austera para tan soberbio marco y costoso bono.

Con las infusiones, un trío de petit-fours que, sin aportar demasiado, sí incluía una buena gominola de piña. Hay que vigilar el lado dulce de la carta…

Al equipo de sala, tan exquisito como en el resto de servicios del hotel, sólo le faltó explicarse un poco más en la presentación del plato.

Buena cocina ampurdanesa para una escapada con encanto y de alto standing.

Post written by Daniel Muro

Tags: girona, hotel, Hoteles, mas de torrent, relais & châteaux, Restaurantes, spa, torrent

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